Radio Albayzín

miércoles, 24 de diciembre de 2014

Jorge Alvariño, Fotofija para cine

JORGE ALVARIÑO, FOTOFIJA PARA CINE


Los fotógrafos de cine, unos grandes desconocidos para el público cuyo trabajo sin embargo puede contribuir a llenar salas enteras o provocar que los potenciales espectadores no suelten ni un solo euro en entradas. En pleno centro de Madrid visitamos a uno de ellos, Jorge Alvariño, para conocer su trabajo. Nos recibe en una casa, su casa, tan trufada de elementos cinematográficos que no disimula -más bien todo lo contrario- la pasión de su morador por el séptimo arte. Es fotógrafo de cine, y en España es prácticamente imposible no haber visto su trabajo más reciente: el póster de la última película de Santiago Segura, “Torrente 5”.
El estudio de los carteles de cine, si bien es algo que motiva a muchos coleccionistas, no es demasiado conocido desde un punto de vista fotográfico. De entre los pocos artículos que hay acerca de esto, en uno de ellos publicado en Jot Down se dice de estos carteles que son “una colección de retratos más o menos inspirados”.
Tienen razón en muchos casos. Hay muchos pósteres que ves ahora mismo por la calle que parecen un retrato del book de un actor: su cara con una expresión determinada, y debajo el título del film.
Un cartel de cine me parece que es un soporte artístico muy interesante cuando está integrado en la película. Si te metes más en el proyecto y muestras algo que es especial y único de la película en la que estás trabajando, eso es lo realmente interesante para mí como fotógrafo de pósteres: sintetizar en una imagen la esencia visual y narrativa de una película.
Foto: Eduardo Parra (Quesabesde)
Jorge Alvariño en su estudio.
Algo que hemos encontrado revisando pósteres de películas es que hay patrones que se repiten. Lo que decías de las cabezas flotando sobre un título o el héroe de espaldas, por ejemplo. Da la sensación de que hay poca creatividad y muchomarketing que solo busca sacar bien a la estrella.
En pósteres, como has dicho, hay de todo: desde unos muy simplones que no aportan nada al espectador salvo saber quién sale en la peli, hasta pósteres repetidos una y mil veces. Sin embargo, también hay muchísima creatividad y estudios de diseño y fotografía haciendo trabajos buenísimos. No hay más que mirar la web IMP Awards para ver miles de trabajos espectaculares.
En el extranjero la industria del cine se toma el marketing de una manera bastante seria. ¿No pasa lo mismo en España?
En España hay de todo, aunque en general las producciones no le dan la importancia que debería tener al marketing de una peli. Es relativamente normal encontrarte a fotógrafos sin experiencia en un set, e incluso se da el caso de que la persona que hace la foto fija [fotografía durante el rodaje de la película] también se encarga del vídeo del making of, que son dos trabajos incompatibles desde mi punto de vista.
Sin embargo esto está mejorando a pasos agigantados, y ya hay productoras que acostumbran a realizar una foto fija y pósteres de calidad invirtiendo en grandes fotógrafos y estudios de diseño. En España yo he trabajado con Apaches, Telecinco Cinema, Antena 3 Films, Amiguetes... productoras que le dan una importancia muy grande al marketing y a la venta de sus películas a nivel nacional e internacional.

jorge alvariño
Preparando esta entrevista hablaba con Santiago Segura, director, guionista, protagonista y productor de “Torrente 5” y una persona que vende muy bien sus productos. Me comentaba que en el cartel de esta película que tú has fotografiado la decisión final a la hora de elegir el póster ha sido suya porque, según él, el cartel es la imagen de la película. ¿Es Santiago Segura un caso especial en nuestro cine?
Santiago Segura es uno de los directores y productores españoles con los que he trabajado que más importancia le dan al marketing y a cómo se va a vender su producto. La sesión de fotos que hicimos para “Torrente” consistió en tres días de trabajo en los que nos desplazamos el diseñador y yo a la localización en la que estaban rodando. Estuvimos toda la jornada de rodaje esperando a que nos fuesen trayendo actores, con los que teníamos de quince a veinte minutos para hacer los diferentes encuadres que necesitábamos para las muchas ideas de póster que teníamos.
No todas las producciones son como “Torrente”, que tiene una campaña de marketing tan potente, pero estoy seguro de que parte del éxito de la saga “Torrente” se debe precisamente a esa manera que tiene Santiago de entender la promoción de sus pelis.
¿Y qué pasa si te ponen pegas?
Pegas en una sesión de fotos promocional para el póster no ponen nunca. El problema que hay es que, al hacerse las fotos en medio de la jornada de rodaje, el rodaje es lo primero. O sea que a veces te quitan al actor cuando estás en el mejor momento de las fotos. Pero eso es parte del trabajo. Para mí lo mejor es una jornada exclusiva de fotos de promo. Así el actor está totalmente a mi disposición y concentrado en las fotos.
En cambio durante el rodaje, haciendo foto fija, sí que te ponen pegas. Eres un reportero en medio de un ambiente de trabajo en el que tu aportación no influye directamente en el funcionamiento y el ritmo del rodaje. Incluso a veces estorbas, y si el rodaje va con retraso lo más seguro es que no te den tiempo para facilitarte el trabajo.
Por eso es muy importante conocer el ambiente y la manera de trabajar en una película, para saber cuándo puedes hacer una foto, cuándo tienes que apartarte y cuándo puedes pedir un momento para ti y para que los actores posen en medio del set.
jorge alvariño
¿No os torturan bastante ya por tener que usar durante los rodajes esa comodísima caja, el blimp, para que la cámara no haga ruido?
[Ríe] Sí, es un incordio, pero me parece fundamental para poder trabajar en un rodaje. Elblimp es una caja estanca que insonoriza la cámara para poder hacer fotos mientras se rueda con sonido directo. Es una maravilla porque no detienes el rodaje para hacer tus fotos de escena, no molestas a los actores en los ensayos y te permite pasar más desapercibido.
Es un armatoste muy incómodo y vintage del que espero librarme muy pronto, ya que he visto las nuevas cámaras de Sony, las A7, que no hacen nada de ruido al disparar y la calidad de imagen, el rango dinámico y el resultado que dan con ISO altos son espectaculares. ¡Me muero de ganas de probar una!
¿Y qué ocurre cuando no hay tiempo y las fotos tienen que salir sí o sí? ¿Hacéis magia para que un trabajo de dos horas salga en quince minutos?
Para eso me pagan. Un fotógrafo de pósteres es un fotógrafo publicitario muy, muy especializado que controla el lenguaje de los pósteres a la perfección, tiene experiencia fotografiando celebridades y tiene muchísima capacidad resolutiva.
No es algo exclusivo del mundo del cine. Con celebridades cuyo tiempo vale una fortuna tienes que tenerlo todo perfecto para que, cuando llegue la estrella, todo sea pim-pam y hacer la foto perfecta. Tienes muy poco tiempo para hacer las fotos de un póster con Clive Owen y también tienes muy poco tiempo para hacer un retrato publicitario con Cristiano Ronaldo.
jorge alvariño
¿No hay margen de error?
No hay margen de error. La responsabilidad es muy bestia.
¿Significa que no es un trabajo para cualquier fotógrafo?
Exacto.
¿Hay en ese pim-pam espacio para la creatividad?
Lo normal es que te den unas pautas claras de lo que necesitan para la promo de la película. En el rodaje lo de menos de un foto-fija hoy en día es reproducir el encuadre que hace la cámara de cine. En cualquier momento puedes hacer una foto que puede ser el póster de la película, como pasó en “Agnosia”, y eso es fruto de la creatividad y visión del fotógrafo. Un fotógrafo de rodaje creativo y con una visión clara de la película y su promoción al final tiene miles de fotografías de rodaje, muchas de ellas susceptibles de acabar en un póster.
En pósteres, igual: hay indicaciones sobre lo que buscan, pero si estás sintonizado con la idea de la película, es muy probable que aportes mucho de tu creatividad al resultado final y algún póster sea una foto que se te ha ocurrido a ti, como el teaser-póster de “Open Windows”, que no existía como boceto, surgió en la sesión de fotos y contiene gran parte de la esencia de la película.
Pero al menos sabrás de qué va la película.
Normalmente has leído el guion, y las fotos se hacen en el rodaje cuando ya has visto al actor moverse, ciertos gestos, actitudes que ayudan a la hora de hacer las fotos.
Pero hay veces que, o bien simplemente no te dan el guion, o bien las fotos las haces con el director al lado dando indicaciones y tú solamente tienes que poner unas luces y apretar un botón. Lo cual, dentro de lo malo, tampoco está tan mal porque te están pagando igual. Pero, claro, la creatividad es prácticamente nula, aunque siempre intentas aportar algo que haga esa foto tuya.

jorge alvariño
¿Cuál sería, pues, tu forma de trabajo ideal?
Leer el guion, hacer un estudio de los actores, hablar con el director, hablar con los productores para saber cómo quieren vender la peli, conocer a los actores y desde el día uno estar pensando y haciendo imágenes icónicas que puedan convertirse en un póster. Por supuesto ir al rodaje todos o casi todos los días, codo a codo con el equipo técnico y artístico. Ésa es la forma para mí en que se consigue una integración en el proyecto, algo que se nota al final para que las fotografías y los pósteres sean de calidad.
Cualquier día puedes hacer la foto que termine siendo el póster de la peli. Esto no quiere decir que no puedas realizar este mismo trabajo yendo a un rodaje cinco días y realizando una jornada de fotos de póster. Pero la calidad final de uno y otro se nota.
Al menos no sufriréis de intrusismo.
Por desgracia, sí. El intrusismo en fotografía de cine ha destrozado esta profesión, porque entre unos y otros han bajado las tarifas a límites absurdos.
El intrusismo por el que mi trabajo de foto fija o de pósteres de cine lo termina haciendo alguien sin experiencia en rodajes simplemente no lo entiendo. Muestra un desinterés y un desconocimiento totales en la promoción de la peli por parte de los productores.
El problema viene cuando profesionales de esto están reventando el mercado. Los productores prefieren pagarle por ejemplo 500 euros a un fotógrafo X en vez de 1.000 a un fotógrafo Y que quiere mantener las tarifas correctas, y al final este fotógrafo Y se ve obligado a bajar su tarifa a 750. Y si ese fotógrafo Y lo hace por 750, el fotógrafo X sin experiencia baja a 300. Es un desastre y una muestra de competencia desleal que no beneficia a nadie.
jorge alvariño
Te ha pasado, me da la sensación…
Me acaba de pasar hace nada. Me llaman para hacer un póster porque el director y el diseñador del cartel de la película quieren que trabaje con ellos. Yo, feliz, les digo que okey, y que cuenten conmigo. Me llama el productor para pedir presupuesto, se lo envío y me piden que haga un ajuste y luego otro, lo normal en estos tiempos. Finalmente llegamos a una cifra en la que, en principio, todos estamos de acuerdo.
Pasan los días y no me llaman para confirmar la sesión de fotos, y yo, que me imagino lo que está pasando, escribo al productor preguntándole cuándo vamos a hacer las fotos. Su respuesta es que finalmente no pueden destinar tanto dinero al póster y finalmente no haré las fotos.
Unos días después me entero de que han avisado a otro fotógrafo para hacer esas fotos, con un presupuesto cerrado que le ha dado la productora muy inferior al mío, totalmente fuera de mercado. Así es imposible competir.
Sin embargo, y a pesar de todo, hoy con mil soportes publicitarios más allá de la simple parada de autobús, como pueden ser banderolas para farolas, aplicaciones de teléfono, publicidad para Internet… ¿a pesar de todo el trabajo no va bien?
Por un lado no hay tantos rodajes grandes que necesiten campañas de marketing potentes, y por otro, como ya he dicho, hay mucho intrusismo en las películas y series con presupuestos más normales.
No es que haya menos trabajo. Lo que pasa es que viene Perico el de los Palotes, que tiene una cámara de fotos y hace el trabajo por tres duros, y como muchos productores no le dan la importancia que tienen a las fotos de rodaje y al material promocional, los profesionales que mantenemos unas tarifas más o menos aceptables no podemos competir con esos precios.
Ahora mismo se valora muchísimo más el presupuesto que el porfolio del fotógrafo que estás contratando y ése es realmente el gran culpable de la devaluación del fotógrafo en rodaje como una profesión a tiempo completo.
jorge alvariño
jorge alvariño
Fotografías de rodaje de "Agnosia" (arriba) y "Verbo".
Pero, si no tengo entendido mal, tú te metiste en el mundo de la foto fija a través de tu hermano, que trabaja en el mundo del cine, ¿no?
Eso es correcto en parte. Yo empecé en el mundo del cine gracias a mi hermano, pero lo hice recogiendo cables del suelo como auxiliar de vídeo en “Octavia”, un trabajo que no necesita la cualificación que hace falta para ser foto-fija y para el que me tuve que poner las pilas en tres días o si no me echaban.
Fue trabajando como auxiliar de vídeo y auxiliar de cámara como aprendí a moverme en un set antes de trabajar en mi primera peli como foto-fija: “The Birthday”. Yo ya había rodado tres películas y muchísimas publis como auxiliar.
Y ahora, ¿qué ocurre? ¿Que entran directamente con la cámara en la mano?
Sí, en algunos casos así es. Escucho historias de compañeros de rodaje que me hablan de foto-fijas golpeando al cámara en medio de una toma o incluso haciendo fotos con flash en medio del rodaje. Un despropósito.
No es la primera vez que me llaman a mí para salvar los muebles la última semana de rodaje y que haya una foto buena del director y una foto buena del protagonista porque al que contrataron en su momento no ha sido capaz de hacer una sola foto que les valga.
jorge alvariño
jorge alvariño
Fotografías de rodaje de "Agnosia" (arriba) e "Intruders".
Te sentirás como el príncipe que salva a la princesa, por lo menos.
Yo les cobro lo que les tengo que cobrar, y les digo que si me hubieran llamado antes no pasarían estas cosas y encima se habrían ahorrado el sueldo del otro fotógrafo.
¿Se aprovechan de esa manía que tenemos los fotógrafos de fotografiarlo todo aunque no nos lo hayan pedido y no lo vayan a pagar?
No se aprovechan. Simplemente tienes un contrato que dice que todas las fotos que hagas son suyas.
Entonces situémonos en ese momento en que ya has apretado el botón. ¿Cuál es el siguiente paso?
Una vez termina el rodaje, entrego las fotos a la productora y ésta se las pasa al estudio de diseño que va a realizar el póster. He colaborado con muchos estudios y últimamente estoy trabajando más con Iñaki Villuendas, con el que me entiendo muy bien. Cuando estamos pensando cómo va a ser un póster, las ideas de Iñaki combinadas con mis ideas de foto siempre van en la misma dirección y encajamos muy bien.
Unas veces el trabajo de diseño lo hace totalmente la empresa de diseño y yo no veo los pósteres hasta que están acabados, y en otras recibo bocetos según se van haciendo y voy dando mi opinión. Normalmente el resultado final suele encajar con la manera en la que he abordado el trabajo, tanto en la sesión de fotos del póster como a lo largo de la película.
Para mí el mayor éxito es que una foto, sin apenas intervención de diseño, se convierta en el cartel de la peli. Eso quiere decir que mi trabajo ha gustado y lo he hecho bien.
jorge alvariño
jorge alvariño
Fotografías de rodaje de "Agnosia" (arriba) y "Hierro".
¿Y cuando las cosas no encajan? ¿Cuánto te destrozan una foto?
Por suerte no me ha pasado jamás.
Pero, ¿entraría eso dentro del “para eso me pagan”?
El cine es muy exigente, y cuando firmas un contrato las cesiones de derechos son totales. Tengo algún contrato que dice que cedo los derechos de todas las imágenes que genere durante el rodaje por todo el tiempo de la humanidad y en todo el universo conocido o por conocer. Es muy divertido, pero eso quiere decir que si en Marte se descubre vida y proyectan una peli en la que yo he trabajado, no podría cobrar derechos de autor.
Sin ser ridículo como ese contrato, en un contrato normal de una peli las fotos de rodaje pertenecen a la productora y pueden hacer con ellas lo que quieran, o sea que sí, para eso me pagan. En Estados Unidos, donde la foto fija en cine está muy bien pagada, tienes una cláusula por la que, si una sola foto de las que haces en rodaje termina en el póster, te pagan una cantidad X de dólares por los derechos de explotación. Aquí esos derechos van dentro de lo que cobras a la semana.
¿Te gustaría que tus fotos fueran reconocidas con tu firma?
Tengo asumidísimo que mis fotos no se van a firmar. Cuando empecé como fotógrafo de escena existía una asociación de foto-fijas en la que los fotógrafos se preocupaban por que sus fotos no salían firmadas en periódicos y revistas del medio. A mí me da igual salvo con determinadas fotos de making of, porque eso sí que es un trabajo más personal del fotógrafo.
Por supuesto que me gusta que me reconozcan como el autor de tal o cual póster, pero que aparezca firmado no lo veo necesario. El que quiera saber quién es el autor de un póster lo tiene muy fácil para dar con el nombre del fotógrafo y diseñador: o bien los créditos de la pelio si no una búsqueda rápida en Google o IMDb.
He leído que te defines como mitad fotógrafo y mitad contable, algo que por desgracia pueden decir muchísimos fotógrafos. Ya nos has dicho que no eres millonario, pero, ¿hay espacio para rechazar trabajos?
[Ríe] Eso lo dije por el tiempo que pierdo haciendo números, presupuestos y de cobrador del frac para que me paguen facturas, pero creo que como cualquier autónomo.
Yo, ahora mismo, por suerte, tengo muchísimo trabajo: hago carteles de cine, realizo campañas publicitarias, soy director de foto de dos revistas para iPad, VIS-À-VIS y MINE, donde realizo portadas y editoriales de interior fotografiando a celebridades, tengo un cursoon-line en Domestika sobre retrato editorial al que os invito encarecidamente, imparto cursos yworkshops...
Sin embargo, rechazar un trabajo sigue siendo un lujo al alcance de muy pocos. Yo no tengo ningún problema en hacer lo que sea siempre que esté pagado correctamente. Sin embargo, sí rechazo trabajos que estén muy por debajo de la tarifa que creo que tendría que cobrarse. Trabajar por debajo de ciertas tarifas es pan para hoy y hambre para mañana.
Artículo publicado en www.quesabesde.com por Eduardo Parra

miércoles, 19 de noviembre de 2014

10 Imágenes del World Press Photo 2014 elegidas por 10 fotógrafos


10 Imágenes del World Press Photo 2014 elegidas por 10 fotógrafos.


Cuando a mediados de febrero se otorgan los premios World Press Photo, los corrillos de fotógrafos son un hervidero de comentarios -a favor y en contra- en torno al fallo del jurado. Dejando de lado el debate que han generado las dos últimas fotografías vencedoras, planteamos a una decena de nombres destacados del ámbito fotográfico -ocho fotógrafos y dos profesionales estrechamente vinculados a este prestigioso certamen- con qué foto o reportaje se quedan de la última edición, cuya muestra itinerante ya ha pasado por Madrid y estos días puede verse en Barcelona.
1
Silvia Omedes: “Shannon”, de Abbie Trayler-Smith
Foto: Abbie Trayler-Smith
La presidenta de Photographic Social Vision, la fundación que cada año trae la exposición del World Press Photo a Barcelona, se decanta por la imagen que desde esta entidad han elegido para ilustrar la campaña de la presente exposición. Se trata del retrato que Abbie Trayler-Smith hizo de la joven Shannon el día antes de que le implantasen un balón gástrico para perder peso. “Es un retrato potente, directo y muy valiente. Nos sirve para explicar que los conflictos internos y domésticos también nos ayudan a reflexionar.”
Silvia Omedes va más allá, y habla de la importancia de las imágenes que se escapan de los asuntos que habitualmente ocupan titulares en los medios de comunicación: “El fotoperiodismo y la fotografía documental pueden tratar temas interesantes tanto locales como de ámbito externo. No existe solo la fotografía a nivel internacional o de conflictos.”
Segundo premio en “Retratos posados” (individuales) | Página personal de A. Trayler-Smith
2
Abbie Trayler-Smith: “Healing Bobby”, de Peter van Agtmael



Precisamente Abbie Trayler-Smith, autora de la imagen que estos días usa Photographic Social Vision para promocionar la muestra World Press Photo en Barcelona, también ha elegido para Quesabesde su obra favorita. Después de darle un par de vueltas, y tentada de quedarse con el trabajo “The Last Outfit of the Missing”, de Fred Ramos, se decanta finalmente por “Healing Bobby”, de Peter van Agtmael.
“Una de mis fotografías preferidas de esta edición del World Press Photo es ésta de Peter van Agtmael. Me encanta la imagen de Bobby flotando en la piscina”, dice Trayler-Smith, que argumenta así su decisión: “Lo que me gusta de esta historia es que no ves sus heridas ni su cara desfigurada, sino que le ves a él como una persona normal en su vida diaria.”
La fotógrafa británica, que lleva varios años documentando a Shannon, la protagonista de su retrato premiado, pone especial atención en la labor del autor de Magnum Photos a nivel emocional: “Es una fotografía muy íntima, y yo siempre respondo ante este tipo de fotografía.”
Segundo premio en “Retratos robados” (reportaje) | Página personal de Peter van Agtmael
3
Oriol Segon: “Escape”, de Danila Tkachenko

El autor del galardonado trabajo documental “Young Patriots”, Oriol Segon, se queda con “Escape”, del prometedor Danila Tkachenko. En esta serie, realizada con una cámara analógica, el autor ruso retrata a varias personas que han decidido vivir al margen de la sociedad refugiándose en zonas boscosas del centro de Rusia. “Es un trabajo que evoca muy bien lo que representa el aislamiento de las personas. Por otra parte, creo que es un proyecto de gran profundidad psicológica”, comenta Segon.
El autor de Manresa destaca el boom de la fotografía documental rusa, que según él “pasa por un momento de esplendor”, y advierte de que habrá que tener muy presente al joven Tkachenko, de solo 25 años. “Utiliza los recursos simbólicos y estéticos en favor del contenido. Me gusta cómo juega con el concepto de la constancia en el medio en el que se encuentran los protagonistas de la historia.”
Primer premio en “Retratos posados” (reportaje) | Página personal de Danila Tkachenko
4
David Airob: “Black Gaza”, de Gianluca Panella

“Es difícil decidirse ante trabajos de tanta calidad, pero puestos a elegir me quedaría con el de Gianluca Panella.” Airob se refiere a "Black Gaza", un reportaje en el que predominan las atmósferas envolventes y misteriosas.
El fotógrafo de La Vanguardia, que este año ha recibido junto a David Ramos y José Bautista el tercer premio de cortometrajes en el apartado multimedia del World Press Photo con la pieza “Calcio Storico”, comenta acerca de este trabajo: “Me gusta la originalidad al abordar el tema y que lo haga de un modo tan atrevido a nivel lumínico.” El italiano muestra inquietantes calles de Gaza durante los frecuentes apagones que sufre debido a unas infraestructuras deficientes que dependen del diésel que llega con cuentagotas desde los países árabes vecinos.
Airob aprovecha para mencionar asimismo el trabajo de Elena Chernyshova “Days of Night, Nights of Day”, del que destaca “la sensibilidad de la autora, su forma de mirar”. La fotógrafa rusa retrató la vida en la ciudad de Norilsk, situada en el Círculo Ártico y cuyos habitantes soportan temperaturas de hasta 50 grados centígrados bajo cero y unas cotas de polución que la sitúan entre las diez ciudades más sucias del planeta.
Tercer premio en “Noticias generales” (reportaje) | Página personal de Gianluca Panella
5
Eugeni Gay: “Final embrace”, de Taslima Akhter
La instantánea de Taslima Akhter es una de las más periodísticas de la vigente edición del certamen. Cuando el edificio Rana Plaza de Daca se vino abajo, sorprendió a centenares de trabajadores de las cinco fábricas de ropa que albergaba. Y este último abrazo -de una pareja de la que se desconoce la relación que tenían- dio la vuelta al mundo en cuestión de horas.
Para Eugeni Gay, ganador del Premio Nuevo Talento FNAC con su trabajo “Desde la isla cuántica”, que pudo verse en gran formato en la pasada edición de Les Rencontres d’Arles, esta imagen encierra un gran potencial: “La primera vez que vi esta fotografía estaba convencido de que sería la ganadora del World Press Photo.”
La fotógrafa y activista bengalí Taslima Akhter captó con su cámara una imagen capaz de resumir lo mejor de la vida en la propia muerte. El de Barcelona lo resume con estas palabras: “Es una imagen muy poética que habla de la muerte, del amor, de la desesperación, de aferrarse a la vida...”. Y no pasa por alto los motivos y las responsabilidades de la tragedia: “Ocurrió en el derrumbe de un edificio en Bangladés debido a las malas condiciones en que estaba. Tampoco hay que olvidar que había empresas textiles españolas implicadas.”
Tercer premio en “Noticias de actualidad” (individuales) | Página personal de Taslima Akhter
6
Eloy Alonso: “Rebels attack government checkpoint”, de Goran Tomasevic
Algunas de las imágenes más destacadas de la prensa diaria en España llevan la firma deEloy Alonso. Bregado en infinidad de situaciones difíciles, no es de extrañar que este fotógrafo asturiano destaque el trabajo de Goran Tomasevic -compañero suyo en la agencia Reuters- en Damasco.
Sobre la escalofriante cobertura que el serbio hizo del ataque de un puñado de guerrilleros de las fuerzas rebeldes sirias a un checkpoint controlado por el ejército gubernamental, Alonso afirma que “este excelente trabajo muestra la esencia del reportero de guerra en primera línea”. En efecto, Tomasevic acompaña a los combatientes con todo el peligro que eso conlleva, “con un riesgo que muy pocos saben, quieren o pueden asumir”.
“En este, como en muchos trabajos, Goran no narra visualmente lo que ocurre a solo unos pasos del combate, sino que está dentro del mismo. Y en esta secuencia vemos sus fotos y no solo nos dan en la boca del estómago, sino que también traen, de paso, el sonido y el olor de la guerra.”
La proximidad y el punto de vista de Tomasevic prácticamente le hacen partícipe de la acción. En ese sentido, el mínimo retoque –el trabajo fue publicado originalmente en color- deja que sean las propias imágenes las que cuenten la crudeza de la situación. “Huye mucho del Photoshop”, argumenta su compañero de agencia. “Hoy por hoy es uno de los mejores en zonas calientes, aunque tampoco es manco en el resto de trabajos.”
Primer premio en “Noticias de actualidad” (reportaje) | Blog en Reuters de Goran Tomasevic
7
Erik De Kruijf: “A Portrait of Domestic Violence”, de Sara Naomi Lewkowicz
Aprovechando que el responsable de proyectos expositivos de World Press Photo estuvo presente hace unos días en la inauguración de la muestra en Barcelona, le pusimos en la tesitura de seleccionar una de las obras premiadas. “Para mí es muy difícil quedarme con una foto de entre todas. Podría comentar algo de cualquiera de ellas, pero el reportaje de Sara Lewkowicz es muy interesante.”
De la historia de violencia doméstica de una madre con dos niños y un novio que llega a ser muy violento, De Kruijf extrae una de las imágenes más explícitas: “Esta fotografía ha dado mucho que hablar, y la gente incluso la criticó argumentando que la fotógrafa debería haberse llevado a de allí a la niña o al menos haber intentado evitar que él pegara a la madre. En vez de eso ella estuvo allí, tomando fotos, documentando.”
A continuación, plantea uno de los grandes interrogantes morales del fotoperiodismo: “¿Cuál debería ser el rol del fotógrafo? Creo que esta foto en particular plantea este interrogante más claramente que ninguna otra en la muestra. Yo no tengo una respuesta para esta pregunta.”
Erik De Kruijf coincidió con Lewkowicz, y explica las motivaciones de la autora estadounidense: “Me dijo que, para empezar, ella era demasiado pequeña [físicamente] para parar al agresor. También admitió que podría haberse llevado de allí a la niña, pero que ya había presenciado situaciones similares cientos de veces porque el tío era muy violento.” Recuerda asimismo las palabras de la fotógrafa: “Decidí documentar lo que estaba ocurriendo y después llevarme a la niña y llamar a la policía.”
El holandés defiende la postura de su organización en este debate: “World Press Photo no está para juzgar”. Y añade: “Es una imagen perfecta para que la gente se dé cuenta de lo que significa ser fotógrafo. ¿Es documentar la única labor del fotógrafo, o en ocasiones debe interferir para evitar algo? Creo que no hay una respuesta clara. Lo que sé es que esta imagen explica muy bien lo que es la violencia doméstica.”
Primer premio en “Temas contemporáneos” (reportaje) | Página personal de S.N. Lewkowicz
8
Eduardo Momeñe: “Mother and Son”, de Denis Dailleux
Foto: Denis Dailleux (Agence VU)
La importancia de los retratos en el certamen World Press Photo es creciente. Incluso en esta edición la categoría se ha dividido en dos: posados y robados. Y por esta disciplina se inclina Eduardo Momeñe con un retrato de la serie “Mother and Son”, de Denis Dailleux: “Es una fotografía que me llega. Me es difícil racionalizar una imagen fotográfica, pero está bien resuelta, es directa, permite a los rostros y a los cuerpos que se expresen.”
Esta serie muestra a una docena de culturistas egipcios posando con sus madres. Hay en todos los retratos un punto de ternura y orgullo, algo que por otra parte es habitual en Egipto.
El fotógrafo madrileño también hace referencia a los aspectos formales del retrato en que aparece el culturista posando con su madre ante un fondo neutro, con una iluminación lateral superior suave que viene de una ventana. “El espacio está bien acotado. Es clásico, también es walkerevansiano, y la luz de Rembrandt también habla”, comenta Momeñe acerca de esta foto de Mikael y su madre. “Una fotografía bien hecha, sobre seres humanos, con ojo de fotógrafo.”
Segundo premio en “Retratos posados” (reportaje) | Página personal de Denis Dailleux
9
Muhammed Muheisen: “Typhoon Survivors”, de Philippe Lopez
No se trata solo de que el tema sea suficientemente relevante, sino que también importa su factura, cómo está contada la historia. Prueba de ello es la fotografía que Philippe Lopez hizo en Filipinas unos días después del paso del tifón Haiyan y en la que vemos a unas mujeres cargadas con imágenes de santos caminando por un paisaje desolado. Es la elección deMuhammed Muheisen, ganador de dos premios Pulitzer y jefe de Associated Press en Pakistán, quien afirma que al verla por primera vez “dejó un eco resonando dentro de mí”.
Y es que al igual que el abrazo inmortalizado por Taslima Akhter, esta instantánea dio rápidamente la vuelta al mundo en cuestión de horas. “Recuerdo muy bien esa imagen ya antes de que ganara el premio. Cuando la vi sentí la tragedia reflejada en las caras de las personas retratadas.”
La fuerza de esta imagen radica tanto en las expresiones de sus protagonistas como en las proporciones épicas que da la suave y cálida luz que ilumina a las protagonistas, en contraste con un fondo devastado y desenfocado.
Primer premio en “Noticias de actualidad” (individuales) | Porfolio en AFP de Philippe Lopez
10
Alfons Rodríguez: “Typhoon Haiyan”, de Chris McGrath
El cofundador de la Caja Azul, Alfons Rodríguez, selecciona otra imagen de la misma tragedia causada por el tifón Haiyan y contada también desde el lado humano de quienes la sufrieron. Chris McGrath documentó la destrucción que dejaron tras de sí los vientos más mortales que se recuerdan en Filipinas: más de 6.000 muertos y cuatro millones de desplazados internos.
“La luz es tan intensa y especial, que te identificas al instante con la atmósfera que allí se respiraba en ese momento.” Rodríguez destaca asimismo la diferencia de actitudes ante el desastre: “Se ve la pérdida y la angustia en las caras de los adultos, mientras que en los niños se refleja la inocencia y la ignorancia que suele mantenerlos ajenos a las preocupaciones por el futuro, algo a lo que no escapan los adultos.” Es precisamente esa diferencia la que le da fuerza a esta fotografía.
El fotógrafo barcelonés, ganador de un premio Godó de Fotoperiodismo por su trabajo sobre el genocidio en Srebrenica, tira de experiencia a la hora de valorar un trabajo difícil en los planos logístico, emocional y sobre todo narrativo: “He vivido estas situaciones, y la foto de McGrath refleja a la perfección esa sensación tan difícil de mostrar en una imagen.”
Primer premio en “Noticias generales” (reportaje) | Página personal de Chris McGrath

Artículo publicado por Iván Sánchez en www.quesabesde.com

martes, 9 de septiembre de 2014

Entrevista al fotoperiodista Mingo Venero, finalista del Premio Internacional de Fotografía Humanitaria Luis Valtueña


Entrevista al fotoperiodista Mingo Venero, finalista del Premio Internacional de Fotografía Humanitaria Luis Valtueña.


Desde que la fotografía irrumpió por casualidad en su vida, Mingo Venero ha dirigido su trayectoria hacia trabajos documentales de marcada denuncia social. Como "Silenciosa espera", finalista en la pasada edición del Premio Internacional de Fotografía Humanitaria Luis Valtueña, que versa sobre la problemática de la migración subsahariana. 
En 2003 descubriste tu pasión por la fotografía.
Fue el fotógrafo cántabro Manuel Alcalde quien -como él dice- me metió en el cuerpo el veneno de la fotografía. Sucedió entre febrero y marzo del 2003. Descubrí la fotografía por casualidad: mi novia de por aquel entonces quería aprender fotografía y nos apuntamos los dos al curso.
mingo venero
Mingo Venero visto por Marcelo Aurelio. | Foto: Marcel Aurelio
¿Qué es lo que te llamó la atención de este mundo y por qué decidiste a coger una cámara para documentar lo que sucedía a tu alrededor?
Al principio todo me pareció alucinante: entender todo el proceso fotográfico y toda la teoría, empezar a ver fotos increíbles desde los clásicos hasta ahora… Pero lo que más me fascinó fue el cuarto oscuro, la ampliadora, los químicos, preparar las diluciones, ver surgir la imagen en la bandeja de revelado… Después entendí que la fotografía es un lenguaje, con sus múltiples posibilidades, y empecé a encontrar la manera de contar las cosas que yo quería contar y cómo las quería contar. Ésta fue la clave para saber que quería dedicarme a esto.
¿Es la fotografía un trabajo o una pasión? ¿O son dos conceptos que van estrechamente ligados?
Encontrar algo que realmente te apasione no es fácil. Si además puedes ganarte la vida con ello, te puedes sentir un privilegiado. Por lo general la mayoría de fotógrafos que conozco -y me incluyo también- se puede decir que sobrevivimos económicamente. Pero también es cierto que muchos no cambiaríamos por una mayor estabilidad económica las satisfacciones, experiencias, personas conocidas y por conocer, etcétera, que nos ha ido regalando y nos regalará la fotografía.
¿Para qué sirve la fotografía?
Depende de para quién y del uso que se le quiera dar. Puede servir desde para pasar el rato hasta para ganarse el pan. Algunos la utilizan hasta como terapia personal. La fotografía es un lenguaje, es comunicación. La fotografía es muy amplia, tiene muchos cometidos.
Foto: Mingo Venero
Fotografías de la serie "Silenciosa espera". | Foto: Mingo Venero
¿Y la fotografía documental?
La fotografía documental sirve para hacer partícipe al espectador de lo que ocurre, de lo que te llama la atención, y siempre de una manera personal. Mostrar, comunicar y dejar un documento de ello. Ya sea un paisaje, una ciudad, un lugar, un evento social, una guerra… La fotografía documental también sirve para posicionarse en el mundo y en lo que en él ocurre. Si nos referimos a la fotografía documental que denuncia cualquier situación, acto o historia, el cometido también es despertar conciencias.
¿En qué campo te sientes más cómodo y te desenvuelves mejor? ¿Fotografía documental? ¿Fotoperiodismo? ¿Una mezcla de ambos?
Soy fotógrafo; hay que partir de eso. Efectivamente, soy fotógrafo documental, y mis dos vertientes son el reportaje y la fotografía urbana. Me siento cómodo cuando simplemente fotografío lo que pasa. Bueno, lo que veo que pasa.
Pero últimamente estás más centrado en la fotografía documental que en la urbana.
Bueno, en realidad no es así exactamente. Es cierto que últimamente estoy mostrando trabajos documentales que he ido desarrollando tiempo atrás. En cuanto a la foto de calle nunca me he centrado en ella; es decir, no salgo a hacer fotos por la calle, sino que siempre llevo la cámara encima en mi día a día, con mis amigos, cuando viajo... Así que si veo algo que me llama la atención, hago fotos.
Foto: Mingo Venero
Fotografías de la serie "Silenciosa espera". | Foto: Mingo Venero
¿Es la fotografía el medio más poderoso para hacer reportajes de denuncia?
Depende de dónde se muestren. En prensa escrita, en papel, seguro que un reportaje con imágenes tendrá más impacto que sin ellas. En otras plataformas como Internet, exposiciones, etcétera, creo que compaginar la fotografía con el vídeo puede ayudarte a contar partes de la historia que únicamente con la fotografía no se pueden explicar del todo. El poder que puede tener la imagen es algo que todos conocemos. Hay fotografías ahora icónicas que en su momento tuvieron el poder de cambiar algunas cosas.
¿Sigue conservando la fotografía el poder de impactar, sorprender y cambiar el mundo?
De impactar y sorprender, seguro. Lo de cambiar el mundo lo veo más complicado. Llegar a remover las conciencias de los que pueden cambiar las cosas puede pasar, pero aun así creo que poco iban a querer cambiar las cosas los que han querido que las cosas sean como son. Lo que no podemos dejar de hacer es mostrar lo que ocurre en el mundo.
¿Se cuentan mejores historias en blanco y negro que en color?
No, ni mejor ni peor. Son lenguajes diferentes, nada más que eso.
Foto: Mingo Venero
Fotografías de la serie "Silenciosa espera". | Foto: Mingo Venero
Eres uno de los cofundadores del colectivo Calle 35. ¿A qué os dedicáis?
Somos un colectivo de fotografía urbana y nuestra principal finalidad es divulgar esta fotografía. Lo que pretendimos al formar el colectivo es que Calle 35 fuera un punto de unión para los apasionados de la foto de calle en España porque no había ese lugar. En cuanto a las actividades que realizamos, regularmente estamos impartiendo talleres, realizando exposiciones y tenemos actividad semanal en el blog.
Este año fuiste uno de los finalistas del Premio Internacional de Fotografía Humanitaria Luis Valtueña con el proyecto “Silenciosa espera”, que a su vez fue galardonado con el premio REVELA.
He tenido la suerte de ser finalista del Valtueña, y este premio dio mucha más visibilidad a la problemática de la que trato en mi proyecto. El premio REVELA es un ejemplo de lo que debiera ser un premio en el que se trata un tema social, ya que el premio de este concurso se destina íntegro a la asociación que desarrolla la ayuda a la comunidad o a personas retratadas en el reportaje fotográfico. En mi caso participé con Médicos del Mundo (Bélgica) y han recibido 25.000 euros para su proyecto en Marruecos en ayuda médica a los migrantes subsaharianos.
“Silenciosa espera” es el tercer capítulo del proyecto “Errantes por un sueño”, que vengo realizando desde hace varios años. El proyecto trata sobre la migración subsahariana a Europa, y en este capítulo muestro la estancia de los migrantes en Marruecos.
Las condiciones en las que viven estas personas en Marruecos son muy duras: sufren agresiones policiales, robos, violaciones… y no se hace casi nada por cambiar las cosas. Las alianzas de los gobiernos hacen que se pasen por alto las continuas violaciones de los derechos humanos que allí ocurren. Es muy triste que se permita que ocurran estas cosas.
Foto: Mingo Venero
Pareces desenvolverte con mucha soltura en el mundo de la fotografía de calle ostreet photography. ¿Están los teléfonos móviles destinados a convertirse en la mejor herramienta en este tipo de tareas o todavía queda sitio para un buen 35 milímetros pegado a una telemétrica?
Antes de nada, un inciso: he de decir que no me gusta el concepto street photography. Sé que es un anglicismo que en estos momentos está de moda, pero prefiero decir fotografía urbana. Respondiendo a la pregunta, las cámaras que se utilicen son el mero instrumento para fotografiar.
Los móviles están siendo utilizados por todo el mundo y la verdad es que se ven fotos magníficas realizadas con ellos. Sin embargo no creo se vayan a convertir en la mejor opción. Serán una más, y entre estas opciones siempre habrá para elegir un cuerpo con un objetivo.
¿En qué estás trabajando ahora mismo?
De trabajo personal continúo con el proyecto “Errantes por un sueño”, y por otra parte siempre voy con la cámara encima, así que voy añadiendo fotos de calle al archivo. Mi amigo David Salcedo me dice que tengo que parar un poco y revisar archivo, así que ése debería ser mi siguiente trabajo.
Junto con David estamos montando una historia que se va a llamar "Territorios Libres" y de la que pronto tendréis noticias. Con Calle 35 estamos trabajando en la edición de una colección de libros de autor, y en estos momentos estoy trabajando en la selección y edición de la misma.
Foto: Mingo Venero
Foto: Mingo Venero
¿Qué foto clásica te gustaría que llevara tu firma?
¿Solo una? Hay muchas fotos que me encantan de los clásicos; es difícil elegir una. Pero si tengo que elegir alguna foto, seguramente sería de Koudelka o de Doisneau. Sin embargo, creo que hacer una buena foto puede ser relativamente sencillo. Todos tenemos alguna foto buena. Así que en vez de elegir una foto quizá buscaría un trabajo o algún proyecto, y en este caso los trabajos de Koudelka me interesan mucho.
¿Existe la foto perfecta?
Si hablamos en términos de composición, seguramente todas las fotos se podrían mejorar en parte, pero para mí no es primordial el aspecto compositivo. Si una foto no me llega emocionalmente, no me vale que la composición sea perfecta. Será una muy buena foto, pero sin alma. Para decir si existe esa foto perfecta habría que saber para quién o para qué esa foto es perfecta.
¿Qué convierte a una buena foto en una foto excelente?
Precisamente lo que comentaba anteriormente: una foto se puede convertir en excelente por lo que te pueda llegar a generar. Para mí eso es importantísimo: conseguir transmitir emociones, sentimientos… Por otra parte, también se puede considerar excelente una foto cuando congela un instante único, irrepetible e increíble, por ejemplo. Pero estamos hablando de opiniones y gustos, y lo que para mí puede ser una foto excelente puede que para otro sea una buena foto sin más.
Foto: Mingo Venero
Foto: Mingo Venero
¿Cómo ves las polémicas que suele levantar el uso de Photoshop en la fotografía? ¿Debería haber restricciones?
El Photoshop es una herramienta más. Tú pones los límites. No creo que tenga que haber restricciones mientras se sea honesto o no se manipule cuando no sea ético o profesional hacerlo, o cuando no esté permitido.
En el ámbito de la fotografía documental la manipulación no se entiende, ya que se trata de mostrar la realidad. Hay medios de comunicación y concursos que ponen unos límites y me parece correcto que sea así. Si, por ejemplo, en vez de fotografía documental hablamos de fotografía creativa, collage, etcétera, no creo que el uso de Photoshop genere ninguna polémica. Así que creo que la honestidad con lo que se hace y su fin es la clave para que no haya polémica alguna.
¿Cómo va a evolucionar la fotografía documental en los próximos años?
Se están creando plataformas de contenidos documentales de gran calidad. Creo que el futuro del documentalismo va a ir en ese sentido.
¿Y el fotoperiodismo? ¿Tiene futuro tal y como lo conocemos o va a dar un giro inesperado en los próximos años?
Todos sabemos que el fotoperiodismo no está pasando por su mejor época. Se sigue haciendo fotoperiodismo y de muy buena calidad, lo que ocurre es que estamos viviendo una transición en cuanto a los medios de comunicación para que los reportajes lleguen a la gente.
El fotoperiodismo está evolucionando y se van a encontrar vías para poder financiar la prensa por Internet. Imagino que llegará un momento en que quien quiera ver buen fotoperiodismo pague por ello en diferentes plataformas, básicamente como se ha hecho siempre con los periódicos y las revistas. Es muy triste que los medios que quieren material gráfico para web no valoren el trabajo de los fotoperiodistas y pretendan conseguirlo de forma gratuita.
Foto: Mingo Venero
Foto: Mingo Venero
¿Qué tiene que tener un proyecto fotográfico documental para que te fijes en él y capte tu interés?
Por lo general un proyecto documental lo que más necesita es tiempo. Tiempo para dedicarle, para empatizar con las personas, para hacer crecer el proyecto. Con ese tiempo el reportaje va a tener más peso emocional y seguramente la historia va a estar mejor contada. Cuando un fotógrafo ha dedicado tiempo a un trabajo eso se nota.
Muchos piensan que, por lo general, una buena historia documental tiene que ser dramática. Eso no es cierto, y critican a los fotógrafos por querer mostrar solo miserias, como se suele decir. Quizá lo que ocurre es que a cierta gente le duele y no le gusta ver ciertas realidades. Por eso se suelen recordar este tipo de historias más duras, porque captan más nuestro interés.
¿Y qué tiene que tener una historia para que quieras fotografiarla y darla a conocer al resto del mundo?
Lo fundamental es que me motive de una manera emocional e ideológica. Si no empatizo con una historia, seguro que habrá otra persona que lo contará mejor. También me interesan las historias de superación y denunciar injusticias. En nuestra vida diaria también hay historias que puede ser interesante documentar, historias cotidianas, del día a día. Solo hay que verlas: si se hacen con cariño y dedicación saldrá una buena historia visual.
A lo largo de la historia ha habido grandes maestros de la fotografía documental. ¿Quiénes son tus ídolos?
Ídolos no tengo, ni en la fotografía ni en ningún otro aspecto de la vida. Son personas normales que han trabajado duro por un fin. Eso es lo que podría ser digno de admirar, pero tanto como para que sean ídolos… Hay trabajos documentales admirables, eso también.
Tengo muy mala memoria para los nombres, tanto de fotógrafos como de trabajos documentales. Seguro que por Internet se encuentran las listas de los fotógrafos y trabajos documentales más representativos de la historia, y esas listas seguro que son más fiables de la que yo pueda dar. Ya he nombrado a Koudelka, pero hay muchos otros.
Foto: Mingo Venero
Foto: Mingo Venero
¿Cuándo sabe uno el momento en el que dar carpetazo a una historia y empezar una nueva?
Esto es algo que es muy complicado de decidir en determinadas historias. Hay reportajes que tienen un principio y un final porque se producen en un determinado espacio de tiempo, pero la gran mayoría de las historias que se suelen documentar se podría decir que no tienen un final, o que por lo menos no es cercano. Ahí el fotógrafo es el que tiene que decidir cuándo cerrar un reportaje y pasar a otro o retomarlo con el paso del tiempo.
El caso de mi proyecto "Errantes por un sueño", por desgracia, es un reportaje cuya historia jamás va a acabar. Siempre va a existir migración clandestina mientras exista tanta desigualdad en el mundo, lo que provoca hambre, enfermedades, guerras... entre otras cosas. Se podrían contar pequeñas historias con principio y final dentro de la migración clandestina, pero el tema principal no va a tener final.
Lo de contar historias a través de la fotografía, ¿es algo innato o se aprende a golpe de obturador?
Imagino que el proceso de cada persona puede ser diferente. Hay fotógrafos importantes que vienen de familias de fotógrafos, otros que tomaron la fotografía a mediana edad, otros que primero estudiaron en escuelas de fotografía… Lo que sí que he notado es un rasgo común en los fotógrafos documentales: son buena gente, así que algo deben llevar dentro para decidirse a contar historias. Siempre digo una frase a mis alumnos: aprender se aprende en gerundio. Es decir, que a fotografiar se aprende fotografiando.
Foto: Mingo Venero
Foto: Mingo Venero
Algunos fotógrafos se interesan por las historias para conocer el final de las mismas, otros quieren disfrutar del viaje y aprender algo nuevo. ¿Con qué te quedas tú?
Me quedo con las personas que he conocido y con las experiencias vividas. Me interesa mostrar y comunicar, y sobre todo después de ello me quedo con la esperanza de llegar a remover las conciencias de la gente, sobre todo de las que tienen el poder para cambiar las cosas para que en todo el mundo se pueda vivir de una manera digna. ¿Una utopía? Creo que no.
¿Qué te ves haciendo dentro de diez años? ¿Seguirán existiendo las cámaras de siempre o iremos todos con las Google Glass?
¡Sí, y todos iremos en naves espaciales! No, pienso que las cámaras seguirán existiendo por muchos años; nosotros no las veremos desaparecer. ¿Qué estaré haciendo dentro de diez años? No sé lo que voy a estar haciendo dentro de dos meses… Espero que de aquí a diez años pueda seguir decidiendo lo que quiero hacer, que pueda seguir haciendo lo que me gusta.
¿Algún consejo para aquellos que quieran seguir tus pasos?
Que me adelanten por la izquierda, que yo voy despacito. En la era de la inmediatez en la que vivimos un buen consejo sería dejar reposar un poco las fotos, analizarlas, reflexionar y después mostrarlas.
Por otra parte, el error principal que he cometido es no moverme más por el mundo, así que mi consejo es que viajen todo lo que puedan.

Artículo publicado en www.quesabesde.com